¿Recuerdan al personaje? Es el botero que conduce la carga de pecadores al Infierno. Golpea con su remo a rezagados y renegados que no quieren abordar y aparece en "La Divina Comedia", el poema épico con el que Dante dio clientela a las iglesias.
Y VOY DE CUENTO:
La Humanidad tardó miles de años para llegar a las mil millones de personas a principios del siglo XIX. Luego, en solo cien años, dobló la cifra y llegó a los dos mil millones en los años 20; y de seguidas -en sorprendentes apenas cincuenta años- ¡la volvió a doblar! De esa manera, en la década de los 70, llegó "La Tierra" a tener cuatro mil millones de habitantes. Hubiese sido momento propicio para reflexionar ¿no creen? Pues si alguien lo hizo no tuvo éxito: el 30 de Octubre de 2011, a las once y cincuenta y ocho minutos de la noche nació en Filipinas Danika-Mae Camacho -a quien simbólicamente la O.N.U le asignó el número 7.000.000.000- y la Humanidad llegó a esa cifra. ¿Cuántos seremos ahora, si según cálculos de los expertos añadimos cada día un cuarto de millón de bebés al planeta? No haga Ud. el cálculo -se lo ruego- y si lo hace no me lo diga.
Pero oigan, no es que esta roca con agua se va a hundir por su peso en el espacio. El problema es cómo alimentar a ese gentío. cómo educarlo, cómo enseñarlo a convivir, cómo cuidar su salud física y mental -si es que ésta última la tiene algún humano- "We are in trouble, you know?" debería decir alguien si es que alguien no lo ha dicho. ¿Saben, por ejemplo? -y esto es baladí- ¿que si China e India tuviesen para su población el mismo número de automóviles que en proporción tiene USA para la suya, necesitaríamos, en recursos, dos planetas como éste? Pero eso no es nada, pues bien puede uno transportarse a pie, en bicicleta o autobús. ¿Y el agua potable, amigos? ¿Y el pan de cada día? ¿Y la carne, si por el contrario estamos acabando con muchas especies animales terrestres y acuáticas? ¿Y la espiritualidad de esa gente, si es que todavía a alguien eso le interesa?
LA NATURALEZA SE DEFIENDE
Por supuesto que debe hacerlo, pero yo no sé cómo. Desde niño oigo decir que pestes, guerras y desastres naturales "sirven" para aliviar la expansión humana y por eso existen. Aunque algunos afirmen que esa forma tan cruel de comportarse es obra de Dios, ¡YO DIGO QUE NO! Si Dios es todo Amor y Bondad, ¿cómo podría plantearse semejante forma de control? ¡Absolutamente NO! Dios debe tener otras formas de hacerlo, sólo que Ud. las desconoce y yo también. ¿La infertilidad de algunos no será una de esas formas? ¿Algunas "disfunciones" orgánicas que tratamos de combatir farmacológicamente no será otra? Incluso la vida de los no heterosexuales -que los induce a formar parejas sin la posibilidad de procrear- ¿no será una tercera? Claro: curas y acólitos seguirán defendiendo la figura del Jehová celoso y colérico que plantaron en el "Antiguo Testamento" y es capaz de cualquier atrocidad. Ese Dios implacable que según ellos mandaba destruir ciudades y poblaciones; que decretaba plagas de langostas y escorpiones; que ordenaba exterminios y lanzaba maldiciones; ese es el Dios al que atribuyen terremotos y ciclones, guerras y dolores "para detener el avance de la superpoblación del mundo" ¡Insensatos! Jesús los hubiera expulsado de la casa de su Padre por embusteros.
¿QUÉ HACER ENTONCES?
¡Que voy a saber yo! Si lo supiera no estaría sentado frente a esta pantalla reflexionando con Uds. Estaría actuando porque el asunto es grave, es urgente. Mientras tanto ¿qué nos queda? Emplazar a los depredadores humanos a que detengan la destrucción del planeta; a los políticos a ser sinceros y cesar en la ambición y su engañifa cómplice -no es un chiste- y a los curas a interpretar a Dios en las palabras y la obra de su Hijo, bien distinto a la figura con la que nos aterrorizan y obligan a ir al confesionario para que ÉL nos perdone ser humanos.
DECLARO
Tengo en el corazón al Dios que Jesús me explicó, no el que diseñó el "Concilio Ecuménico de Nicea" para complacer al emperador Constantino. Creo que las iglesias de Cristo deben pasar a la acción y no confinarse a los templos sólo para cantar loas a Jehová los domingos y entonar villancicos en Diciembre. Tampoco para escuchar a algunos pastores (?) que relatan el "testimonio" de cómo Dios les ordenó en sueños comprar su última camioneta Hummer. Deseo un Cristianismo activo, no pasivo. Un Cristianismo de conducta cristiana permanente, no ocasional. Un Cristianismo que enfrente los hechos y no se refugie "piadoso" y silencioso en la liturgia. Aspiro a un Cristianismo inteligente, no cerrado a la razón ni a la realidad del Mundo.
CONCLUYO
TENEMOS UN PROBLEMA: la población mundial crece en densidad y disminuye en espiritualidad. Ya Malthus lo dijo: el crecimiento humano ocurre en proporción geométrica mientras los alimentos crecen en proporción aritmética. Yo lo completo: la espiritualidad decrece en la misma proporción en que crecen los humanos, y la Bondad ni siquiera en la misma proporción en que crece su condumio. ¿Vamos a hacer algo, sí ó no? Si hay una Iglesia, no importa su denominación, que se decida por lo primero, que me llame. Si no, que sigan orando a nadie y jugando "Candy Crush". Los espero en el bote de Caronte (pero yo no voy al viaje)
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