sábado, 28 de noviembre de 2015

¡ADIOS, VENEZUELA!

¡ADIOS, VENEZUELA!

No nos veremos más, fíjate tu. Buenos años los que pasamos juntos: los disfrutamos. Me diste esposas, hijos, estudios, profesión, empleo; compartimos amigos, uno que otro pariente y no digo hermanos porque quienes  fuimos no lo fuimos nunca;  y buenos conocidos de amable recuerdo. Tu humor me encantó y la generosidad de tu gente hasta que llegó la barbarie delictiva del centro y del sur continental; disfruté la rochela, las hayacas de Diciembre y el pan de jamón. Tus mujeres fueron hermosas hasta que se descuidaron genotipo y fenotipo, y tu clima bondadoso.  ¡Ciao, Patria! ¿Me voy al Exterior? NO, quien se fue fuiste tu. Te desmontaron a pedacitos como quien desmonta un lego. Te fueron quitando piezas  y te enviaron a los Castro para que hoy sirvas como peón en su ajedrez. Bien tonta fuiste, ex Patria, que  te dejaste, y bien cobardes nosotros que te dejamos.

Esto lo escribo en 28 de Noviembre de 2.015 y es sábado. Es temprano en la mañana y estamos viviendo los últimos días de Paz.  En  Diciembre 06 entregarás tu última pieza, no importa cuál sea el resultado de la elección que esperas. De ganar la oposición –y el Gobierno "aceptar" el resultado- a esa “Asamblea Nacional”  la convertirán en sal y agua y eso ya está decretado. El poder de legislar pasará a las hordas comunales y las leyes se aprobarán por aclamación: “¿están de acuerdo?...¿seguro?...¡APROBADO… !  Esa será la tónica, a la par de otras salvajadas. El Presidente ya lo advirtió en cuatro  declaratorias que llevan a esa lectura: “ganaremos como sea…no entregaremos...la revolución pasará a otra etapa… gobernaré con una junta civil y militar y con el pueblo”.  Solo un pendejo podría pedir más claridad. Y de ganar el oficialismo castrista, pues con pleno derecho entregaría el resto de ti. Por eso te digo que no nos veremos más, ex país pusilánime que no supiste defenderte. 

martes, 20 de octubre de 2015

LA IRA, EL SOMA Y LA PALABRA INÚTIL

Venezuela está iracunda. El Gobierno lo está contra los opositores; los opositores lo están contra el Gobierno; el venezolano independiente lo está contra ambos.  Igual el consumidor siente ira contra el comerciante que lo especula, y el empleado contra su empleador y viceversa; el comerciante odia al consumidor aunque lo esquilme; los “bachaqueros” odian a sus cliente-víctimas, y sus cliente-víctimas  odian a los “bachaqueros”. Ira hay en los mercados, las farmacias, los hospitales y las clínicas, en las colas para el transporte, en los mercados privados y de “cielo abierto” que son un infierno; en la morgue y los cementerios.  Venezuela está iracunda. No hay lugar donde no exista ira, ni persona que no la sienta.

¿Por qué esto es  dañino? Porque la ira, igual que el miedo, es una emoción intensamente pasional y por ende peligrosa;  dirige su energía  a la destrucción del  objeto o del sujeto que la causa. Venezuela tiene en su interno ese potencial. Por eso los delincuentes matan a sus víctimas e incluso las despedazan, y las poblaciones linchan a sus victimarios. En las fechas que corren todos somos víctimas prestos a convertirnos en lo opuesto. En Venezuela hay drama.

Por otro lado la ira es un sentimiento doloroso. Mientras se siente se sufre. Y además desorganiza el pensamiento, lo obnubila, bloquea la racionalidad. Otros concomitantes son somáticos: eleva la presión sanguínea diastólica y sistólica; aumenta las secreciones hormonales, especialmente la adrenalina que induce a la acción; tiene efectos negativos de orden gastro-intestinal –úlceras, erosión de paredes estomacales-  y produce elevaciones  en la tasa de descarga neuronal. No hay quien gane, pues, a la ira, en sus efectos endo- y exo-destructivos, y cuando se dan simultáneamente ocurre la debacle. ¿Ergo? Hitler, Alemania y el Nazismo. Un pueblo lleno de ira encontró a un iracundo y asoló a Europa. Fueron setenta y dos millones de alemanes los que respaldaron al Fuhrer, todos bravos, todos coléricos por condiciones nacionales intolerables: la severidad  del tratado de Versalles y una Economía en ruinas.  Eso desquició a Alemania y Alemania desquició al mundo. Son los efectos de la ira.


¿Por qué este escrito? Porque siento que un colapso se avecina, pues  hay rabia. Esa percepción es fuerte y no debo guardármela. La hago notar a mis colegas psicólogos porque nosotros conocemos de emociones y entendemos de comportamientos. ¿No habrá algo que podamos hacer para tratar esta condición colectiva? Es  pregunta que vuelve y me revuelve y hoy quiero formularla a  mis colegas por estas redes. El tope del postre es que en Venezuela ha perdido efecto la palabra. Parece inútil decirla o escribirla.  Se ha impuesto la sordera y la ceguera. Y es que la rabia, en su virulencia   psicológica y somática, tapona los sentidos y sepulta a  la palabra. Es un drama. Yo lo recojo. Venezuela lo padece.

viernes, 25 de septiembre de 2015

MI DISCURSO ANTE LA ORGANIZACIÓN DE NACIONES UNIDAS (O.N.U)

HABIDA CUENTA DE QUE NO FUI INVITADO PARA LA SESIÓN DE HOY (25/09/15)  EN LA QUE ESTUVO EL PAPA FRANCISCO, IGUAL ENVÍO A LA ASAMBLEA DE LA "ORGANIZACIÓN DE NACIONES UNIDAS", MI  DISCURSO. 

Distinguidos representantes de la sarta de cabrones que gobiernan al mundo: pena debería darles estar aquí disfrutando de sueldos, viáticos, honores y prebendas, en momentos en que la Humanidad que lideran sus patronos se derrumba. ¿Para qué han servido setenta años  de hablar paja, "acuerdos" y declaraciones;   si guerras, hambre, miseria, drogas, ignorancia, corrupción y delincuencia se distribuyen en el planeta como las nubes del cielo?¿Y qué hacen los gobernantes, a nombre de quienes Ustedes dicen hablar? Producir esos horrores en sus países y en los países de los demás. Ustedes son una bola de hipócritas tan nefastos como sus amos. Junto con ellos han conducido a la Humanidad al fracaso; y junto a ellos y a Ustedes, todas las religiones declarativas que dicen amar a Dios y no aman a nadie. ¿Saben por qué esa Humanidad es un fracaso? Porque la dirigen  los políticos y no los virtuosos ni los sabios. Y porque esa Humanidad se rige por leyes que redactan esos políticos en sus parlamentos y contubernios para su beneficio y poder, pero jamás las consultan con Dios. Váyanse entonces Ustedes -también políticos- muy largo a las calles de Nueva York y quemen esas credenciales que los acreditan como bribones. Por una única  vez ejerzan  un acto de decencia y regresen a sus países a decir a sus dirigentes que son unos maléficos farsantes y que Ustedes también lo fueron. Excusen Ustedes si les arruiné el día. Vayan por su último bachaqueo y lárguense. 

domingo, 13 de septiembre de 2015

LEVÍTICO EN SOCIALISMO VENEZOLANO

ESTA ES VERSIÓN LEVÍTICO SIGLO XXI

(Lectura para el domingo 13 de Septiembre)

4 Habla César a Ustedes diciendo:

22. Cuando pecare un  Jefe (de Estado) e hiciere por yerro algo contra alguno de todos los mandamientos (de la Constitución) sobre cosas que no se han de hacer y delinquiere;  
23. luego que conociere su delito que cometió, la comunidad presentará como ofrenda al burro macho cabrón (de los Castro) con defecto.
24.  Y pondrá su mano sobre la cabeza del burro macho  cabrón (de los Castro) y lo degollará (cónchale, tampoco es para tanto) en el lugar donde se degüella (tribunal de "La Haya", en Holanda) delante del mundo; es expiación. 
25. Y con su dedo el juez tomará de la sangre de la expiación (un momento: quedamos en que lo de la sangre lo íbamos a discutir) y se lo meterá al burro macho (que ya no lo será tanto) cabrón  (de los Castro) por el trasero (bueno, obviemos esa parte) 
26. y quemará toda su gordura (que mucha tiene) como grosura de sacrificio de paz  (de la que tanto habló el burro macho cabrón de los Castro y no cumplió) así el juez hará por el la expiación de su delito, que no tendrá perdón (pues es de lesa humanidad). Esto es palabra de mi.  

martes, 25 de agosto de 2015

LA TARTAMUDEZ DE LOS PSICÓLOGOS

¿Psicólogos venezolanos en silencio?

No, mejor en tartamudeo. Produjimos un pronunciamiento en Abril 20014, y once meses después produjimos un segundo, lo que no nos califica como mudos, pero sí como tartamudos.  Luego en fecha 06 de Agosto del corriente año, es decir hace diecinueve días, envié a mi amigo Juan Carlos Canga, Presidente Interino de la Federación, una propuesta para que se considerara remitir  al Presidente de la República una misiva con el propósito de ofrecernos como buenos oficiantes para un diálogo nacional. A continuación transcribo el texto:


"Ciudadano 
Nicolás Maduro
 Presidente de  Venezuela.

Señor Presidente, ponga Usted atención. El gremio de psicólogos de Venezuuela, representado por su Federración de Colegios, desea dirigirse a Usted para hacerle una propuesta concreta que consignamos al final de este escrito (pero no salte al final, que el texto previo le da sustento) 
Desde hace tiempo hemos observado -y sentido- el impacto que tiene sobre la salud psíquica individual y colectiva del venezolano, y de quienes con nosotros habitan, las adversidades que vive el país. En pronunciamientos anteriores alertamos sobre la presencia de un estado general de desasosiego, frustración, tensión , y sobretodo alteraciones en el comportamiento que han conducido a episodios de odio, violencia y rabia. El primer alerta lo expresamos en pronunciamiento fechado el 10 de Abril de 2.014 y contiene ocho propuestas y nueve recomendaciones de las que se hizo caso omiso. El 18 de Marzo de 2.015 produjimos un segundo documento en el que insistimos en el alerta sobre los riesgos psicosociales que conlleva la actual situación, y la necesidad de atenderlos antes de que se convirtieran en un problema de salud pública. No fueron atendidos y hoy ya lo son. Los colegas que hacen Clínica reportan un alarmante aumento en el número de consultas por angustia, miedo, desesperanza, ansiedad, depresión, ira, inseguridad, indefensión. agresividad, apatía, repliegue individual y familiar, y por supuesto trastornos psicosomáticos que afectan el estado de salud general y también abarrotan los consultorios de los médicos. Las crisis socio-económicas y políticas, que ya de por sí son graves, ocurren dentro de un contexto-ambiente de hostilidad y conflicto creciente que las agrava. A la vista de todos han ocurrido episodios -todavía afortunadamente aislados- de peligrosas expresiones de descontento colectivo en varios sitios y regiones. Estos incidentes no deben considerarse meros asuntos de orden público; tienen su origen en alteraciones de la emocionalidad que son producto del quebrantamiento psicológico que las subyace.

Por todo lo expuesto proponemos que convoque Usted a un diálogo nacional, real y extendido, que permita, mediante acuerdos y negociaciones, arribar a compromisos que permitan una convivencia en paz y un desarrollo nacional armónico.
La singularidad de esta propuesta reside en que nos ofrecemos en la "Federación de Psicólogos de Venezuela" para servir de facilitadores. No somos políticos sino psicólogos que conocemos de comportamientos, de interacciones y transacciones sociales, de percepción y emociones humanas, de facilitación, investigación y negociación. Ni siquiera hay en esta propuesta una intención gremialista. Ponemos al servicio de la idea nuestras competencias porque Venezuela lo requiere. En manos suyas dejamos esta misiva. Y en las de Dios. En resumen, nos ofrecemos como buenos oficiantes y al servicio de ello ponemos a disposición del país nuestras competencias. Si hace Usted buen uso de esta propuesta, que la Patria os premie. Si no, que os lo demande".

Esta es la misiva que envié a la Junta Directiva de nuestra Federación de Psicólogos para que considerase la conveniencia o  no de remitirla a Nicolás Maduro. Juan Carlos Canga, hoy Presidente Interino de la F.P.V., mi ex alumno y amigo, me informó telefónicamente que había sido aceptada, pero que se harían algunos arreglos en el texto para hacerlo "más institucional". Eso lo acepto, aunque no me divierte. Pero menos me divierte que hayan transcurrido dieciocho días sin una respuesta concluyente a lo que propuse. Quizá sea ingenua mi propuesta; quizá sea una proyección, aunque no hay percepción sin ella;  o quizá no esté escrita en el lenguaje adecuado a la cortesía que exige la diplomacia. A lo mejor es comprometedora; o peligrosa en tiempos duros. Pero siento que  merezco que se me responda y lo reclamo. Especialmente lo hago a mis ex alumnos y amigos Canga y Clara Astorga, directivos de la Federación.  Para los demás colegas: no crean que siento que salvo con esto mi responsabilidad. Eso no es lo importante. Lo importante está en el texto de este  escrito.

P.D  En estos tiempos de enganchamiento, espero no haber ofendido a nadie. 

martes, 11 de agosto de 2015

DEL CRIMINAL LOMBROSIANO AL DELINCUENTE VENEZOLANO

¿Es posible reconocer a  un delincuente por su anatomía íísica? Lombroso dijo que sí y lo plasmó en algo más de una docena de libros que produjeron escozor. Ese médico y criminólogo italiano realizó unas cuantas centenas de autopsias y seis mil análisis de bandidos vivos para construir su teoría del "criminal nato", sujeto con características similares a las del simio. Asimetría en el rostro, frente hundida, orejas de gran tamaño, excesivo largo de brazos, asimetría en el cráneo, gran capacidad orbitaria (miran para todos lados) son algunas de las características de este "ser involucionado", como lo calificó el científico. "¿Será verdad", se ha preguntado el mundo desde entonces. 

Bueno, yo no he realizado las autopsias de Lombroso, pero sí observo coincidencias. El delincuente venezolano pareciera ser una especie y comparte características físicas y sobre todo de comportamiento. Yo lo veo simiesco en sus movimientos y de hablar gutural (cuando dice "uovón", por ejemplo); tiene brazos largos y mueve las órbitas como el que siempre anda buscando algo. Se ve en los "bachaqueros";  en el motorizado que por poco lo atropella; en quien lo empuja en el metro y en el obrero que lo tima. También en la cajera que se queda con su vuelto en el supermercado y en la doméstica que se lleva la comida. Son seres parecidos. ¿O no? Haga Usted la prueba ahorita mismo conmigo: imagine el físico de un malandro y reténgalo tres segundos. Descríbaselo ahora. ¿Verdad que parece un mono? Pues eso fue lo que descubrió el italiano criminólogo. Claro, el delincuente venezolano está tropicalizado, ya no es el jungladescendiente puro. Tiene "finuras", pero por más que se tongonee siempre se le ve la facha. Y en mi descargo digo: no he hablado de razas, por si acaso, así que no se me acuse de racista. Si su delincuente tiene colores, esos se los puso Usted. 

jueves, 23 de julio de 2015

¿ALGÚN DÍA PODREMOS ACEPTARNOS?

EL PROBLEMA ES LA PERCEPCIÓN

Cuando se reciben los estímulos -vía los sentidos- hay un mecanismo cognoscitivo que los selecciona, ordena e interpreta y les asigna significado:  eso es la percepción. Si no existiese ese proceso, nada de lo que vemos, oímos, tocamos, olemos o gustamos tendría sentido para nosotros. Sencillo, ¿no?

Ni tanto. Resulta que en la percepción intervienen "mediadores" que la matizan. La  experiencia personal es uno de ellos; también el contexto en el que la percepción se produce, las expectativas, los intereses, las motivaciones  y para colmo ¡la emoción de quien percibe! Si todas esas cosas son distintas en cada uno de nosotros, ¿cómo vamos a percibir igual? "Ni que San Juan agache el dedo", diría mi mamá. "Ni de vaina", diría mi papá. Por eso es que en alusión bíblica y de ser cierto el episodio de Babel, lo que Jehová confundió para que no nos entendiéramos fue el lenguaje perceptivo, no las lenguas habladas. No hay manera de entendernos porque NO PERCIBIMOS IGUAL. No lo hacemos ahora ni lo haremos nunca; y si no fuera suficiente con lo hasta aquí escrito, la percepción, que es un proceso cognitivo -es decir, que permite incorporar conocimiento- como tal proceso requiere de memoria, atención e inteligencia ¡Casi nada!

Siendo este el caso, no aspire Ud. amigo que lo entiendan ni  aspire Usted a entender a otros. Olvídese de eso. Si no lo hace, no se explicará las lides del matrimonio, ni la relación con sus hijos, ni las guerras entre naciones, ni las matanzas religiosas, o en los cines de Louisiana. No entenderá a la Humanidad. Pero no se mortifique: hace apenas algo más de dos mil años se busca una salida. Por ahora no se nos ha ocurrido sino la tolerancia, pero ¡que difícil! Otra solución sería dejar de privilegiar a la razón y dar ese lugar al corazón, que fue lo que planteó aquel joven carpintero galileo de cuyas palabras el mundo ha hecho caso omiso. ¿Por qué no lo escuchamos otra vez?